Hace poco más de dos años, durante una comida en Dangyang, el pueblo de mi mujer, una medio-pariente a la que apreciamos mucho manifestó su intención de comprar un coche. Como sabía que yo había trabajado en la fábrica de Volksawagen, me preguntó qué opinión tenía de esta marca de coches. Yo le respondí que no me parecía necesario comprar un coche en su situación, ya que ella y su familia vivían a dos pasos de sus puestos de trabajo y de la escuela de su hija, y añadí que en Europa mucha gente en su situación optaría por una simple bicicleta. También señalé que en el otro lado de Eurasia mucha gente está preocupada por el medio ambiente y ya no se siente menos por no ser propietaria de un automóvil.
Grave error. Nada más terminar mi frase, el silencio de los comensales me indicó que, como de costumbre, había aconsejado más allá de mis posibilidades. Aunque para nada había sido mi intención, lo salido por mi boca había sonado condescendiente a oídos de mis allegados chinos, y para cuando quise explicarme, mi mujer, que hacía las de interprete, me hizo saber que era mejor no añadir más leña al fuego. Y es que, pese al reciente boom de las bicicletas de alquiler, en China, la compra de un coche sigue siendo prácticamente obligatoria para casi cualquier pareja en edad de casarse que se lo pueda permitir. ¿Tanta lata con el desarrollo para luego acabar pedaleando? Ni hablar.
Hasta hace un par de semanas, yo observaba esta parte de la realidad china y sus tribulaciones desde una apacible distancia, convencido de que me encontraba a salvo por mi condición de demonio blanco. Estaba la mar de feliz en mi calidad de no-conductor y no-propietario de coche alguno, pero a medida que se mi mujer comenzó con los preparativos de nuestra ceremonia de boda (ya os hablaré de ella), comencé a sentir la incómoda sospecha de que mis días en el limbo automovilístico estaban a punto de terminarse. No en vano, en los últimos años todo el país se ha convencido de que “lo tradicional” es que los padres de la novia se encarguen de poner el coche mientras que los del novio apoquinan con la vivienda.
Los que seguís el blog sabéis que me aterroriza el caótico tráfico chino, y no es para menos. Los accidentes de tráfico son la principal causa de muerte para los chinos de entre 15 y 45 años y la tasa de accidentes mortales por vehículo es 20 veces superior a la española. Por otra parte, mi mujer trabaja desde casa dando clases de chino a través de Internet y yo soy de los que prefiere pagar un poquito más de alquiler si hace falta para vivir cerca del trabajo y poder ir andando. De ese modo me ahorro los gastos y disgustos inesperados del coche, hago ejercicio cada día y ayudo a proteger el planeta. Cuando queremos viajar por el país, lo hacemos en tren, que es mil veces más seguro que las autopistas del país, y en ninguna de nuestras aventuras hemos sentido arrepentimiento por no tener un coche.
Sin embargo, tal y como auguraron mis tripas, esa sensación de satisfacción moral conmigo mismo se fue a freír espárragos con la primera de toda una serie de llamadas telefónicas y argumentaciones kantianas que han arruinado mi ya precaria armonía familiar. Imaginad algo tal que así.
Lele (mi mujer): Mi madre está al teléfono y dice que va a comprarnos un Golf.
Yo: ¿Qué? Ya habíamos quedado en que no nos hacía falta, ¿no?
Lele: Dice que va a comprarlo porque va a poner una puerta automática en el garaje.
Yo: (…) Pues que no la ponga.
Lele: Pero los vecinos ya la han visto hablando con el tío de las puertas y ya les ha explicado que es por el coche.
Yo: Entiendo. Pobres vecinos, haremos lo que haga falta para no defraudarlos.
Lele: No me vengas con tus ironías de mierda, que sabes que no nos gustan. Mi madre dice que se la sopla todo y que lo va a comprar nos guste o no.
Yo: Pues yo paso de conducir en China y lo siento pero tampoco voy a montar contigo. Hasta que la gente no empiece a tomarse en serio la carretera yo no pienso poner una rueda en ella.
Lele: Mi madre pregunta por qué no puedes ser como los demás.
Yo: Los demás pueden conducir hasta el infinito y más allá, que yo prefiero el tren.
Lele: Pero, ¿no te das cuenta de que mi madre nunca se ha dado un capricho? ¿No ves la ilusión que le haría que la llevásemos por el pueblo en nuestro coche nuevo?
Yo: Dile que se saque el carnet y que se quede con el coche si tantas ganas tiene, que es muy joven todavía.
Lele: Dice que mejor lo dejamos para cuando vayamos al pueblo en verano, porque está viendo el coche en Internet y cree que es muy pequeño. Piensa que es mejor comprar un BMW.
Yo: Mejor un Ferrari.
Y así, queridos amigos, voy pasando las semanas, haciéndome a la idea de que, al final, mi suegra se saldrá con la suya. Es posible que a algunos os parezca que esto no es un problema de verdad, y que en realidad debería callarme y dejar que Lele y su madre se den el capricho. Pues llamadme tonto, pero estando como están las cosas con el cambio climático y sabiendo que el siguiente paso puede ser el de tener descendencia, a lo mejor prefiero ser el yerno gilipollas y dar un pequeño ánimo a los chinos que estén empezando a cuestionar la necesidad del coche. Me gustaría pensar que todo pequeño gesto cuenta, pero ya veremos como vamos lidiando con la presión del entorno.



Jajaja…amigo Jabi, creo q llevas las de perder :p
Huelo la derrota, pero soy muy navarro 😆
Hola, creo que este tema puede llegar a perjudicar tu matrimonio, ten cuidado.
Tengo estas luchas pero desde Esoala. Porque a mi pareja (China de Máster que se quedó) le parece pequeño mi piso de obra nueva, porque es solo de 2 habitaciones, y dale k te pego con que tengo que venderlo (ya medio pagado)… Es simplemente el tema que ha elegido para discutir. Si gana, mañana el tena será otro, porque si algo les gusta es tener un problema en mente (k no lo es).. En resumen, que es una guerra que no ganarás, pero cierto es que tampoco ellos te verán conducirlo. Tablas, que pir desgracia cuesta dinero. Dinero para ellos bien gastado por eso de la honra vista por terceros.
En definitiva, Sergio, tenemos que aprender a elegir nuestras batallas. Al final, si lo compran no les voy a hacer el feo de no montar en el coche, pero yo tampoco me voy a apresurar en sacarme el carnet. Tengo 15 años de experiencia conduciendo en casa y nunca he tenido un accidente, pero es que tengo la sensación de que con mi estilo de conducción de abuela obediente corro todavía más riesgos en China. En fin, a ver si con el tiempo se van imponiendo las normas, por el bien de todos. Entonces me compro un Tesla si hace falta, como recomiendan más abajo, o camión de oro, para que alucine la suegra.
Otro tema es lo de “daigou”. Que como otras lo hacen, para recuperar un poco de dinero de su cari vuelo en agosto a China (es trabajadora de una multinacional) quiso hacer un par de encargos para gente… que si envío un bolso k aquí cuesta y allí.. y por ek monedero de wechat se paga… otras venden leche en polvo desde aquí… Ya le dije k en mi casa no evadimos impuestos, y menos ella, que podrían (casi imposible) pillarla y de cara a una renovación de tarjeta de residente… que no se juega, ni se roban impuestos… Otra vez el español tonto que no quiere ganar un dinero extra, para mejorar el nivel… En lugar de alabar tu acción eres visto como un poco tonto jjjj, en fin, una guerra que nadie ganará
Pues pasate a lo eléctrico y así no contaminas
Te veo con coche de todas, todas. Los suegros chinos siempre se salen con la suya por lo de la piedad filial.
Ahora que tengo a mis suegros en casa (6 meses cada año), cada vez que vuelvo del trabajo me encuentro algo nuevo en casa. Y no me refiero a que compren cosas, que también, sino que a lo mejor me han talado un árbol del jardín porque hacía mal fengshui, que ya me lo han hecho tres veces.
Y lo mejor es cuando me ordenan mis cosas sin decirme nada y luego se olvidan de dónde las pusieron. Eso me vuelve loco.
¡Me troncho imaginando a tus suegros machacándote el jardín! Como de costumbre, muy grande, amigo Carlos.
¿Has leído el consejo que te han dado en Menéame? Pídele a la madre un Tesla 3, le doras la píldora diciendo que es lo más moderno, que es eléctrico, que así no gastas petróleo, que es el futuro… Es uno de los coches más seguros que existen. Total, ya que te lo van a comprar, que sea ése. Además, hasta 2019 no te lo entregan… pero tú ahí con la paliza con que es el mejor, y no quieres otro.
Encima, confío en que será bastante seguro, porque el S es uno de los más seguros (si no el que más) de su gama. Y como dices que conducen como locos… pues dos pájaros de un tiro.
Acabo de verlo, Isabel. Me parece un consejo formidable. Lo pondré en práctica en la próxima reunión familiar, aunque con todo lo que cuesta ese coche hay riesgo de que luego me pidan que le compre un castillo a Lele 😆
Queremos una foto con tu nuevo coche!!
Mejor un vídeo ;p
“Lele: No me vengas con tus ironías de mierda, que sabes que no nos gustan. Mi madre dice que se la sopla todo y que lo va a comprar nos guste o no.” ¿Estás completamente seguro de que te quieres casar?
” lo salido por mi boca había sonado condescendiente a oídos de mis allegados chinos” , a mí también me suena condescendiente y no soy chino
Hola Daniel, no te preocupes que la suegra muchas veces dice lo primero que se le ocurre, pero luego se calma. Además, es muy buena persona. En cuanto a eso de que te suene condescendiente, lo entiendo, pero no tenía por qué ser así. Es decir, yo solo quería hacerles saber que en otros países no pasa nada por no tener coche y de paso darles unas pistas para que entendiesen por qué muchos extranjeros como yo siguen sin coche (yo ni siquiera tengo una moto o una bici). También me podría parecer que ellos se ponen condescendientes cuando nos dan la lata una y otra vez sobre las ventajas de tener un coche, pero no me lo tomo así. Entiendo que ambos nos deseamos lo mejor mutuamente, pero que a veces no coincidimos en las fórmulas.
Me encanta tu fé amigo. Como usuario habitual de transporte publico y la vez aficionado al vehiculo a motor te diré que muchos factores juegan tu contra. Al igual que tu conozco las ventajas de otros transportes y lo peligroso del trafico en China, por Dios las tasas de mortalidad son las que teniamos en España en los 80 y en esa cultura automovilistica viven. De ahi que tu suegra piense que el progreso es el coche. Y lo conozco bien pues al vivir gran parte de mi vida en un pueblo y trabajar mis padres en lugares distintos llegamos a tener 4 coches. Si, 4, y no pequeños. Ahora llegas tu a la tradicinal China con tus ideas de progre urbanita liberal eco europeo y a tu suegra le rechinan los dientes. Por mas de acuerdo esté contigo has de saber que aún les faltan veinte años, una generacion educacional y unas dos docenas de leyes medioambientales para ser conscientes del daño que se estan autoinfligiendo.
Expuesto el argumentario mi consejo (y no me le has pedido) es que aceptes el vehiculo. Puedes mantenerte firme en tus convicciones y no usarlo pero si de verdad tienes familia llegará el momento, aunque solo sea un dia que te vendrà bien y facilitara la vida a ti o a tu mujer. Cuando esto pasé vendelo o conviertelo en una jardinera. Ademas tendras a tu suegra de tu parte.
De verdad que agradezco mucho tu consejo, Cesar. Entiendo que a lo mejor más tarde nos resulta útil, pero ahora mismo vamos a cambiar nuestro lugar de trabajo a una provincia que está a 11 horas de carretera. Para dos personas que no están acostumbradas a conducir en China (mi mujer tiene carnet pero no ha conducido desde que se lo sacó), lanzarse a hacer ese pedazo de recorrido es un riesgo innecesario. Además, la universidad en la que voy a trabajar me ofrecen un apartamento dentro del campus, así que no sé cuánto vamos a usar el coche. La solución para mi suegra consistía en dejar el coche en el pueblo y usarlo solo en el Año Nuevo y en verano, pero a mí me parece un derroche innecesario. Por eso le digo que lo ideal es que se saque el carnet ella y que se compre el coche como un capricho personal y más que merecido después de tantos años de trabajo duro. Pero igual que ocurre en los países occidentales, el nivel de consumo de hijos se han convertido en una forma de mostrar el estatus socio-económico de la familia, y en su mentalidad no cuadra que ella tenga un buen coche y nosotros hagamos la entrada al pueblo en autobús 😀
Bienvenido al mundo de casado con una pareja china XD Las suegras y suegros chinos es lo que tienen… Se hace lo que ellos dice si o si jejeje. En estas llevas las de perder. Recuerda que siempre digo que la mayoria de chinos siempre miran antes las apariencias y el ostentar delante de otros que la necesidad real de tener según que cosas… como en este caso un coche todo poderoso super BMW. Mi coche en España tb peligra por el mismo tema que comentabas en la conversación con LELE… mi coche es pequeño si luego queremos agrandar la familia según mis suegros… por lo que me veo tb en un año o dos intentando venderlo (ahora que he terminado de pagarlo) y comprandome uno nuevo mas grande 🙁 Con lo que me gusta mi coche jeje.
Vicente, cuando hablas de tus experiencias te imagino rodeado de un halo místico, como si hubieses alcanzado el tao de las relaciones yerno-suegro. Sospecho que parte del secreto consiste en asentir como un autómata, pero ¿cómo lidias con las ganas de intentar convencerlos de lo contrario? Yo todavía no me puedo resistir, soy muy cabezota y al final siempre acabamos teniendo un drama. A veces barajo la posibilidad de que mi suegra haga estas cosas porque se parte con mis reacciones y le divierte manipularme como a un mono de feria, pero cuando hablamos cara a cara me doy cuenta de que no, que lo del coche es un deseo suyo genuino, aunque está claro que no se ha puesto en la situación. Es decir, ¿puede uno alcanzar tal grado de felicidad solo por el hecho de que los vecinos lo vean metido en un coche de gama media-alta tres o cuatro veces al año? Desde mi punto de vista, ese tipo de gustazos suelen ser muy efímeros, porque como bien dices, luego el vecino tiene hijos, se compra otro coche más grande y se te queda el gozo en un pozo. Yo la verdad es que no lo entiendo, porque he tenido otra educación (no mejor, sino diferente) y no le doy apenas importancia a mis apariencias, aunque reconozco que eso también puede ser un defecto. Yo soy de los que puede vestir la misma ropa hasta que tiene agujeros bien visibles, o de los que se puede pasar todo el día en el trabajo con el extremo del pantalón parcialmente metido en el calcetín, y tan ancho. Reconozco que tampoco se trata de eso, pero gastarte miles de euros solo por darles en los morros a los vecinos tampoco lo veo claro. Tiene que haber un punto medio del tao familiar-consumista en el que nos encontremos y hallemos la paz 😆
Diles que tú compras la placa solar para recargar el coche. Son caras, pero ya son rentables a largo plazo, ayudas al medio ambiente, y te sacas un coche que mola mil millones (y que si por desgracia tienes un accidente, tienes más posibilidades de que te salve el pellejo).
No iba a quedar fardona la casa con la placa solar en el techo… si lo vendes bien, vais a ser los ultra-modernos del lugar, tu suegra no podrá resistirse.
En cuanto al precio del Model 3… Vale 30.000 dólares recién salido de fábrica, ¿qué BMW es más barato? No sé de coches, pero si se van a un buen Volkswagen o un buen BMW, tampoco va a haber tanta diferencia…
A mí no me hagas mucho caso, yo estoy deseando pillar un Tesla que pueda pagar e instalar placas en el techo, así que me está haciendo más ilusión a mí que a ti 😀 Si pagara otro por el Tesla… Ya pagaría yo la parte que faltaba. No me gustan los cohes, pero con ése me casaba.
Yo este tipo de cosas las empecé a entender cuando leí un artículo sobre los “estados de la conciencia”. El deseo es uno de ellos. Para pasar de cosas materiales y darte cuenta de que no te hacen felices, de que es un círculo vicioso (deseo, frustración, compra, depresión post compra, deseo otra vez) tienes que pasar por él.
Si son gente que ha vivido una vida pobre, para ellos el futuro de sus hijos es LA superación personal, el haber hecho las cosas bien, la recompensa por su trabajo.
Descubrirán más tarde o más temprano (si no ellos, la siguiente generación) que eso no les llena. Pero para descubrirlo, tienen que pasar por ahí. Eso de aprender en cabeza ajena es muy complicado. Hay que tener una “mentalidad de riqueza” para comprender que hay cosas que no hacen falta. Quienes tienen una “mentalidad de escasez” quieren poner cuanta más distancia posible, mejor, entre sus vidas y la pobreza de la que quieren huir. Y subir de estatus es un asunto… emocional.
Entiendo tu postura, y yo también estoy ahí… pero yo me crié en un país donde el coche era lo normal, y lo raro era poder salir en bicicleta.
Igual que en los años 60 y 70 en España todo el que pudo se compró un 600, y sin embargo hoy en día un joven que viva en ciudad no se compra un agujero sin fondo como el coche a no ser que lo necesite para el curro, pues en China estarán por ahí.
Las sociedades tienen que aprender viviendo. Llegarán al punto en que estas tú. Pero no van a llegar si no experimentan la sensación de vacío tras gastar una pasta con sus propias emociones. No pueden experimentar eso con tus neuronas, me temo.
Pobretes. Como mi madrina, que me atiborraba a caramelos porque se acordaba de los años del hambre. Estas cosas pasan. Las ecuaciones se pueden aprender solamente con lógica, pero el aprendizaje emocional, o se vive, o no se hace. Y si desean ese coche por lo que significa, porque las han pasado putas, porque se reafirman en su convencimiento de haber triunfado, dejando un país mejor a sus hijos… no pueden dejar de desearlo porque tú les des buenísimas razones, no se han criado como tú, no tienen una mentalidad de abundancia que te tranquiliza diciendo “ya me compraré uno si lo necesito”.
Todo esto así en superficial, intentando sentir empatía, realmente no entiendo lo que sienten, al que entiendo es a ti, pero intento comprenderles a ellos. Como comprendo en España a los abueletes del “si lo dan gratis, tú ve y cógelo”, que educaban a los niños en el sacar todo lo gratis que fuera posible, aunque se tratara de un CD con cuatro versiones de la sintonía del PSOE (verídico).
Un día, saliendo de clase cerca de navidad, vi un camión aparcado. Había una cola-mogollón de gente aplastada, señal de que daban algo gratis. Era una degustación de paquetitos de patatas. Me salió el automático “¡Gratis, cógelo!” Y de repente tuve una epifanía “¿que voy yo a hacer cola y darme de hostias con los tantosmil por un puto paquete de patatas de 30 céntimos? ¿No tengo 30 céntimos en el bolsillo? Si quiero ese paquete de patatas, ¿no me lo puedo comprar sin todo ese jaleo e incomodidad? ¿Tengo hambre ahora acaso? Me voy a mi casa”.
Bueno, pues el problema de las revelaciones y las epifanías es que no se pueden tener en cabeza ajena. Aunque intentes explicarlas.
Igual intentar entender sus sentimientos te ayuda. Porque si es por lógica, vas a estar toda la vida peleándote con ellos, y hombre, es una pena. No lo hacen por fastidiarte, es que probablemente no sepan hacer las cosas de otra forma. A los que apreciamos el pensamiento lógico, nos cuesta, pero las barreras mentales de otro no las puede tirar cualquiera, y menos tirarlas con lógica cuando son barreras emocionales. Tú puedes dar tu opinión, o decir lo que se hace en Europa, y después de rumiarlo mucho tiempo, de aquí a tres años alguno piense “pues no renuevo el coche”. Pero tú das la idea, y ellos si acaso, después de la respuesta emocional negativa a tu ataque contra sus creencias, cambiarán o no.
En fin… por si ayudaba un poco el cambiar de perspectiva. Igual solamente he dicho una serie de burradas que nada tienen que ver con China, pero por intentar, desde la ignorancia, ponerse una en los pies del otro.
Menos mal que mi prometida y mi suegra están en Europa y no hay planes de ir a vivir a China… :_)
A mi no me has sonado condescendiente para nada. Eso sí, creo que la estrategia que has escogido no es la mejor para convencer a nadie. Demasiada confrontación.
Primero de todo tienes que entender, te guste o no, que te estás casando con una chica CHINA, no con una chica de aqui, con todo lo que ello conlleva. En mi humilde opinión, no sé qué te cuesta darle el gusto a tu mujer y a su madre, es otra cultura con otros valores y otras costumbres, al cerrarte en banda de esa manera tan sarcástica lo único que vas a conseguir es que tu familia china no te respete ni te valore, porque entenderán que tú no les respetas a ellos, y esto sin duda va a afectar a tu matrimonio. Me da mucha rabia esta superioras moral que ceeen tener algunos occidentales cuando están en china. Si ellos lo hacen así por la razón que sea, quién eres tú para despreciarlos de esa manera tan condescendiente? Allá donde fueres haz lo que vieres, o sea que menos ironías y más mente abierta, que estás en china, al otro lado del mundo, y sino haberte quedado en casa.
No te pongas nervioso, Carlos. A lo mejor tú has tenido que pasar por el rollo del coche, pero yo no lo veo nada claro. Para empezar, ¿qué hay de tradicional en eso de comprar automóvil para el matrimonio? Eso es simplemente una moda consumista que se les ha metido en la cabeza en los últimos años, pero que no tiene ningún fundamento histórico. De hecho, apenas supera una década de “tradición” en la mayor parte del país. Simplemente es un nuevo hábito de masas que no solo cuestionan condescendientes extranjeros como yo. A mí me parece que en cualquier país es sano y necesario cierto grado de cuestionamiento de los hábitos, porque si no, no cambiaríamos nunca y tampoco habrían existido las costumbres a las que nos estamos refiriendo. Para que te hagas una idea, en la China tradicional, antes de la industrialización, dominaron durante siglos las políticas para favorecer a la agricultura y limitar el comercio (重农抑商). Los que se dedicaban a los negocios eran considerados la clase más baja. Y fíjate lo mucho que ha cambiado China en este aspecto desde los 80, porque durante Mao la mentalidad dominante no era nada amiga del consumismos (ni se lo podía permitir). Ahora bien, ya que hablamos de mi caso, yo creo que sí me he comprometido a seguir el principio tradicional de que trate de aportar lo más que pueda a mi familia: trabajo mucho y ahorro bastante, pero a lo mejor prefiero no gastarme el dinero en tener las cosas que tienen los demás sin realmente necesitarlas. Yo prefiero no derrochar e invertir lo ganado en aprender más y en preparar mi familia para un futuro cada vez más incierto. Tanto más incierto cuando la mayoría de la gente se echa en brazos de un absurdo consumismo sin plantearse sus consecuencias 😉
Evidentemente tú con tu dinero puedes hacer lo que quieras y comprar o no comprar lo que creas oportuno, faltaría más. Lo que no me parece correcto es que cuestiones a tus suegros por querer hacer algo que para ellos es importante, sea por el motivo que sea. En todo matrimonio, y más en uno mixto como es tu caso, se tiene que aprender a ceder y dar el brazo a torcer de vez en cuando, aunque te repatee, pero te lo digo por tu bien y el de tu familia, sino te auguro un futuro de conflicto permanente con tu familia política y con tu mujer.
Por supuesto que hay cosas que nos extrañan e incluso nos disgustan de los chinos, pero son así, no van a cambiar por ti, porque no son ni mejores ni peores, simplemente diferentes. Y del mismo modo que estoy convencido de que tu suegra ha tragado mucho por complacerte debido a las diferencias culturales evidentes, pues a ti también te va a tocar tragarte más de un sapo. Si de verdad quieres a tu mujer no te quedará otro remedio, porque sino como comentaba alguien arriba será una lucha inútil e infinita con ellos que acabará por afectar a tu pareja.
Lo entiendo, Carlos. El problema en nuestro caso es que el coche se quedaría muerto de risa en el pueblo de la suegra durante más de 8 meses al año, porque ni mi mujer ni yo nos vemos conduciendo en las ciudades de China, de momento. Y tampoco nos vemos conduciendo más de 1000 kilómetros por las peligrosas autopistas cada vez que toque volver a Dangyang. Si mi suegra se sacase el carnet ya sería otro asunto, pero dudo mucho que ella fuese a conducir el coche para ir a su tienda a trabajar, a la que se puede llegar andando en 15 minutos (por eso no quiere comprárselo como capricho personal). En otros casos no lo sé, pero en el nuestro se ve muy claro que es un ejercicio de derroche de cara a la galería, sobre todo por la ceremonia de boda que va a tener lugar en julio. ¿Que tendría que aceptar la voluntad de mi suegra? (sus padres están separados y el padre ni pincha ni corta) A lo mejor sí, pero me parece que es un terrible despilfarro. Otro problema es que ella ya se está dando cuenta de que su pequeña zapatería da cada vez menos beneficios por la creciente competencia que hay en el pueblo, y aunque ella quiere hacernos el regalazo, a lo mejor es más conveniente ahorrar o invertir el dinero en otras cosas. Por si las moscas. Esta mentalidad también es muy china, aunque no está nada de moda últimamente. De todos modos, ya veremos lo que pasa, porque no sería la primera vez que cedo ante la suegra 😀
Javi, te voy a contar lo que me está pasando a mí.
Me llega mi mujer de repente y me dice que mis suegros nos quieren comprar un piso (a pesar de que ya tenemos casa hermosa). Yo me quedo perplejo y no entiendo el por qué empeñarse en comprar un piso para alquilarlo cuando no vamos a sacar tanto dinero por el alquiler después de pagar todos los gastos, la agencia, seguro, impuestos a tutiplén, etc.
Al cabo de varios días de preguntar e insistir, me confiesa mi mujer que en verdad es porque todos nuestros amigos chinos viviendo aquí en UK tienen una o dos casas más que están alquilando y mis suegros no quieren que nosotros seamos menos.
A todo esto, ellos sólo pondrían la entrada del piso, y el resto lo pondría el banco mediante hipoteca. Es decir que tendríamos dos hipotecas, meternos en abogados, nos fuerza a hacer declaración de la renta (aquí en UK no tienes que hacer declaración de la renta si eres asalariado y no tienes ninguna otra fuente de ingresos), además de el jaleo y dolor de cabeza durante 20 o más años y todo por no ser menos que el resto.
Yo lo estoy intentando todo para evitar esta locura, pero mi mujer parece que también no quiere ser menos que el resto. Así que no sé qué va a pasar al final.
Deséame suerte compañero.
¡Hola, Carlos! La verdad es que lo que cuentas suena muy complicado y hasta un poco arriesgado, pero me parece que también lo vas a tener complicado para convencerlos de lo contrario. Hay muchas cosas que admiro del carácter de los chinos, como su hospitalidad, su simpatía o su estoicismo, pero eso de comprar lo que los demás sin pensarlo demasiado… De todos modos, yo soy de los que pienso que estos comportamientos cambiarán a medida que el país se desarrolle y que en el futuro cada vez más gente (aunque sea una minoría) dejará de medir su calidad de vida solo en clave de consumo.
Fuera como fuese, te deseo la mejor de las suertes con el asunto de la nueva vivienda y espero que en el futuro nos comentes cómo te va.
Yo tengo una bici para ir al trabajo en Changchun y por ahora me va bien, aunque lo de cruzar la carretera de Jingyue Road pudiera parecer cruzar una pista de Formula 1 con todos los coches a todo gas. Realmente el tiempo que gasto en ir al Hospital son 8 minutos desde mi casa.
Mi novia tiene coche propio y yo voy como un príncipe. Lo del coche es una necesidad si vas de compra a “Metro Supermarket o a Walmart”, porque no queda precisamente cerca. Ella al ser china lo de conducir tiene controlado “aparentemente” y en el trafico del caos chino vive segura y aunque la miro de reojo, aun tengo la sensación de que un día nos la damos y no realmente por su culpa, dado que conduce bien. Tengo que decir que tanto como ella y los chinos parece que nunca miran a la izquierda al salir de una curva, pero los coches que vienen de ese tramo ya hacen el típico reglado de apartarse y no te llaman “hijo ….”. En fin eso es otra historia.
Ella quiere que me saque el carnet, pero yo no me apetece …
Saludos Javier
Ya sabes si vienes por aquí, les invito a comer …
Wow, que difícil y delicada situación, yo intentaría convencer (si las razones lógicas y validas que empleaste no funcionan, como fue el caso) En apelar el lado más emocional, y no por hacerla cambiar de idea, ni manipularla (que algunos lo pueden entender así) más bien para dejarle la semilla y que reflexione sobre el consumismo, si fuera tú le diría algo así: “Suegra, en verdad es importante para usted ostentar el auto con los vecinos? Eso le da felicidad? Más felicidad que por ejemplo, el nacimiento de su hija, el de su nieto (cuando venga, si viene), mucho más que compartir una cena con su familia? Si pudiera tener un lujoso auto, porque su yerno extranjero es “rico”, pero no podría tener buenos momentos de compartir un té (o licor de arroz haha) con ellos (su hija y el yerno) porque viven en constante trabajo para mantener el estilo de vida que aparentan, lo cual les genera más estrés ya que deben fingir para otros, en serio vale la pena ese nivel de esfuerzo para otro que ni siquiera sabe cuando enfermas, cuando ríes, cuando lloras? No disfrutaría al ver a su hija siendo feliz en un apartamento pequeño con dos bicicletas? Sólo porque USTED cree que el nivel de felicidad depende de cuanto tengas y no de su valor como persona? Por último, que le parecería ser recordado después de muerto porque tenia un auto BMW y un Mercedes Benz que usaba un par de meses al año, y no porque era amable, chistoso, una persona que inspiraba respeto, etc, como le gustaría ser recordada?” Tal vez este comentario me lo critiquen mucho o no, quien sabe, pero algo así es lo que yo haría. PD: Y yo agradecería el carro pero no lo usaría al menos que sea una emergencia ineludible, que Lele este de parto a las 2 am, esas cosas xD